En las grandes urbes siempre existen lugares que pasan desapercibidos para la gran mayoría de sus habitantes o de las personas que las visitan. El ejemplo perfecto lo tenemos en CDMX, y el lugar no es otro que una librería, El Burro Culto.
La localización de esta hermosa librería es todo un secreto, y para llegar a ella necesitarás tener una necesidad imperiosa de visitarla y unas ligeras dotes de Sherlock. Un halo de misterio que no hace más que engrandecer esta librería que cuenta con más de siete mil volúmenes en su extenso catálogo literario.
Max Ramos es la persona que se encuentra detrás de este curioso y oculto templo del libro, el cual se mantiene así porque durante sus primeros años de trabajo fue asaltado varias veces. Tras perder textos de mucho valor, decidió que no haría pública la localización de la librería, ya que según su entender la persona que esté realmente interesada en El Burro Culto y en los ejemplares que se encuentran en él hará lo posible por encontrarla.
Para entrar es necesaria una parada previa
Tal y como hemos mencionado, la entrada a El burro culto no es libre. Para poder saber su localización y conocer alguno de los valiosos libros que se encuentran en él hay que acudir previamente a las librerías “El hallazgo” o “Jorge Cuesta”, las cuales también son propiedad de Ramos y se ubican en CDMX.
Una vez allí no todo el mundo consigue la dirección, ya que solo las personas que buscan ediciones muy concretas son las seleccionadas para conocer El Burro Culto.
Todo un rincón de coleccionista que guarda obras enterradas y ediciones únicas en una localización secreta y al alcance de una exclusiva selección de lectorxs. Personas que buscan productos muy concretos y difíciles de conseguir en otros lugares, pero no en El Burro Culto.
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