Este fin de semana, la alcaldía Cuauhtémoc colocó sellos de suspensión en todas las entradas al edificio que acoge esta sala de conciertos. Te decimos cuál es la causa.
Si bien el Plaza Condesa ha permanecido cerrado durante el último año, todo parece indicar que el silencio se prolongará sobre su escenario, incluso con el probable inicio del semáforo verde en la CDMX.
El pasado 22 de mayo, personal de Protección Civil de la alcaldía Cuauhtémoc se presentó en el inmueble ubicado en Tamaulipas 36, en la colonia Condesa, para colocar sellos de suspensión de actividades sobre todos sus accesos y muros. ¿La razón? Una evaluación que considera que el edificio que alberga al Plaza Condesa presenta un alto riesgo de derrumbe.
Una crisis sin resolver
Construido en 1973, el edificio de 13 pisos sufrió daños considerables tras el sismo del 19 de septiembre de 2017, motivo por el cual ya habían restringido su ingreso y uso de forma temporal. Cuatro años después, las autoridades han vuelto a cerrar sus puertas porque las afectaciones estructurales ocasionadas por el temblor se han agravado.
Por si fuera poco, los empresarios que rentan los comercios de la planta baja, así como los vecinos que habitan los pisos superiores, aseguran que el inmueble está en medio un tortuoso litigio comercial entre los antiguos dueños y una compañía que pretende construir un desarrollo inmobiliario en el sitio.
Debido a este estatus jurídico incierto, el comisionado para la Reconstrucción de la Ciudad, César Cravioto, aclaró que el organismo que preside no puede intervenir en este caso.
Así, los tres restaurantes que ocupan la zona comercial sobre la avenida Tamaulipas —Patanegra, The Corner y Don Andrés—, deberán cerrar sus puertas después de meses de haber reiniciado actividades, mientras que los residentes de los 12 departamentos habitados permanecen en espera de una resolución.
En el caso del Plaza Condesa, todo parece indicar que el sismo y la pandemia serán los responsables de bajar su telón para siempre.
Foto de Ed Vill en Flickr