Esta maravillosa ciudad te espera con múltiples opciones para disfrutar un fin de semana completo que incluya experiencias artísticas, mezcal, compras y artesanías. Ve nuestras recomendaciones de los mejores planes en Oaxaca.
1. Realiza un viaje multisensorial en Microenormous
Sin duda alguna, Oaxaca es una ciudad que ha atraído a múltiples artistas de todo el mundo por su belleza y vibra bohemia, sin contar a todos aquellos que han nacido en esta ciudad. Así, si quieres conectar con las más nuevas tendencias del arte multisensorial, debes participar en Microenormous: Life Experience Oaxaca. Se trata de una vivencia con nueve instalaciones artísticas creadas por autores como Sabino Guisu, Jorge Orozco y Paolo Montiel.
A través de música, movimientos, iluminación escénica y representaciones teatrales, en ella te trasladarás a otra realidad en preparación para un nuevo ciclo. Conoce más y reserva entradas en acá.
2. Brinda con el mejor mezcal en Jalatlaco
Como toda ciudad en crecimiento, Oaxaca también cuenta con su propia zona bohemia de bares, restaurantes y galerías: el barrio de Jalatlaco. Localizado prácticamente junto al centro histórico de la capital del estado, aquí podrás probar los más exquisitos destilados de agaves típicos de la entidad, como el famoso espadín o el codiciado tobalá.
Para muestra están las mezcalerías La Calenda, La Casa Grande y Espacio Mezcal, donde se dedican a darle a este destilado el lugar que se merece en la gastronomía de México.
3. Vete de compras al corredor Macedonio Alcalá
Esta importante calle se encuentra en el centro de la capital oaxaqueña, y fue cerrada a la circulación de vehículos en los años ochenta. Desde entonces se ha convertido en la principal vía turística de la ciudad, y no solamente por los bonitos edificios del siglo XIX que la flanquean. En ella encontrarás tiendas de artesanías y plazas comerciales, donde la recomendación es adquirir un auténtico tapete de Teotitlán del Valle, piezas de barro negro de San Bartolo Coyotepec o los coloridos alebrijes.
Este corredor va del zócalo al Ex Convento de Santo Domingo, por lo que resulta el paseo ideal para salir de compras o solamente para sentarse a ver cómo la calle se llena de gente y música al caer la noche.
4. Hazte muchas selfies en el Jardín Etnobotánico
No puedes visitar Oaxaca y no ingresar al Ex Convento de Santo Domingo, que acabamos de mencionar arriba. Este espectacular templo te asombrará por sus decorados barrocos, pues prácticamente no dejaron un espacio sin ornamentar con flores, plantas y motivos religiosos. Anexo al convento, en lo que fueran parte de sus terrenos, te encontrarás con el Jardín Etnobotánico, que resguarda plantas, árboles y flores de toda la geografía oaxaqueña.
Además de hacerte selfies en su paseo escultórico de cactáceas, aquí aprenderás sobre el estrecho vínculo que existe entre los pueblos indígenas del estado y su entorno.
5. Visita Monte Albán de pisa y corre
El estado de Oaxaca es cuna de antiguas civilizaciones indígenas, y una de las más notables es la zapoteca, que aún habita en los Valles Centrales y el Istmo de Tehuantepec. Para remontarte a la época de las grandes pirámides y plazuelas alzadas por este pueblo lánzate a Monte Albán, una ciudadela que fue construida en la cima de un cerro hace 2,500 años.
Desde sus terrazas tendrás algunas de las mejores vistas de las elevaciones y planicies del centro de Oaxaca, así como de su cielo. Por supuesto, no puedes dejar de apreciar su juego de pelota ni el Templo de los Danzantes, decorado con bajorrelieves de figuras humanas.
6. Come delicioso en Pitiona
Para nadie es un secreto que Oaxaca cuenta con una de las gastronomías más ricas y diversas de México. Por eso, nuestra sugerencia es que reserves una mesa en Pitiona, restaurante de cocina de autor dirigido por el reconocido chef José Manuel Baños. El menú que ofrecen combina productos y platillos oaxaqueños con recetas y técnicas europeas de vanguardia.
Pide su mole con chuletón o los tacos de lechón cocinados a baja temperatura y lo vas a comprobar. Otro imperdible de este restaurante es su terraza, que se ubica prácticamente frente al Ex Convento de Santo Domingo de Guzmán: sin duda, la mejor vista para comer en Oaxaca.