
Desde que irrumpió en la música con apenas 11 años, quedó claro que Luis Miguel no era un joven talento más. A los 15 ya tenía un Grammy y antes de los 20 su nombre ya era sinónimo de éxito. En los años 90, cuando el pop latino estaba en plena transición, él no se adaptó, lo definió. Conquistó el bolero, elevó la balada y llevó el mariachi a nuevos públicos. Más de 120 discos de platino, premios Billboard, Grammys y récords que nadie puede igualar. Pero más allá de los números, su trayectoria se mide en algo más profundo: décadas de música que no se desgasta y una voz que sigue sonando como el primer día.
«El Sol de México» tiene su propio cielo en CDMX
Podrías pensar que es un simple apodo, pero no: Luis Miguel es El Sol de México. Desde sus inicios como niño prodigio hasta su consagración como ícono de la música en español, ha iluminado escenarios, marcado generaciones y dejado huella como ningún otro artista en el país. Su voz imponente, su presencia arrolladora y su legado eterno lo han hecho único, y si hay un lugar donde su brillo alcanza su punto más alto, es en CDMX.
Y es que la historia de Luis Miguel se entrelaza con la de los recintos más emblemáticos. Por ejemplo, él es el artista con más presentaciones en el Auditorio Nacional, con más de 250 conciertos en su carrera. En 2006, rompió el récord con 30 fechas consecutivas, un logro que nadie más consiguió en la música en vivo. Y también fue el encargado de inaugurar la Arena Ciudad de México en 2012, sumando otro hito en la capital. Sí, ¡otro más!
Un tributo infalible para el más incondicional
Bajo la cálida luz de las velas de Candlelight, los éxitos de Luis Miguel se desprenden de los grandes escenarios y encuentran un entorno más íntimo en El Cantoral. Acá, su música toma un nuevo matiz a través de la voz, piano, saxofón, bajo, batería y guitarra, para redescubrir temas como Alguien Como Tú, Ahora Te Puedes Marchar o Hasta Que Me Olvides. Un tributo distinto a cualquier otro, donde cada acorde suena más cercano, cada palabra pesa más y cada canción suena como si la escucharas por primera vez.
Hay canciones que nunca pasan de moda, y las de Luis Miguel son de esas que se siguen cantando con la misma pasión. Ahora, sus grandes éxitos se redescubren en un formato único, en la intimidad de El Cantoral, donde Candlelight le rinde homenaje en una velada tan especial como su música.