Al sur de la ciudad hay un rinconcito que emula los jardines del país del sol naciente y es una gran opción donde pasear y relajarse. Te decimos por qué debes visitarlo.
1. Ubicación
Este parque se encuentra en una zona bastante tranquila y no muy concurrida de la ciudad, la colonia Country Club, en la alcaldía Coyoacán. Además es bastante accesible, pues se encuentra cerca de avenida Tlalpan, Río Churubusco y de la estación de metro General Anaya. Al ser mayoritariamente residencial, el tránsito es únicamente local y no encontrarás aglomeraciones.
2. Planeación
Este parque fue un proyecto creado por una importante ingeniera civil mexicana: Ángela Alessio Robles, quien fue directora general de planeación de la ciudad, presidenta de planificación y directora del Plan para el Desarrollo Urbano de la ciudad en la década de 1940, cuando se creó el parque. Entre los proyectos creados durante su gestión están la Torre Latinoamericana, el Autódromo Hermanos Rodríguez y el Centro Médico La Raza. Si su nombre te suena familiar, es porque su padre fue un destacado militar, político e ingeniero: Vito Alessio Robles.
3. Historia
Aunque no siempre llevó el nombre que actualmente ostenta, el parque Masayoshi Ohira siempre tuvo influencia japonesa. Tras ser inaugurado en 1942, la gente se refería a él como El Parque de la Pagoda, pues además de un laberinto y un lago, se erigía una estructura en forma de este característico edificio nipón, del cual actualmente solo quedan algunas imágenes pues fue consumido en su totalidad por el mismo incendio que afectó a los Estudios Churubusco en la década de 1970. Pasaron algunos años y el parque sirvió como escenario para reforzar los lazos entre las comunidades mexicana y japonesa, razón por la cual la temática volvió a circundar en torno a la cultura de aquel país y recibió el nombre del entonces Primer Ministro japonés, Masayoshi Ohira, el primer funcionario de tal cargo en visitar la ciudad, quien falleció poco tiempo después de su visita al país.
4. Influencia en la cultura popular mexicana
La colonia Country Club en su momento fue de gran importancia para la cultura popular mexicana, pues dada su cercanía a los Estudios Churubusco, en ella residían los actores más importantes de la Época de Oro del cine mexicano. Así las cosas, este parque además de servir de espacio de descanso y esparcimiento para los famosos residentes, en ocasiones también servía como locación para películas. Una de las más conocidas es El señor fotógrafo, de Cantinflas.
5. Paisajismo
Aunque en algún momento estuvo descuidado, gracias a la iniciativa de vecinos y autoridades, este parque ha sido revitalizado en años recientes. Las estructuras de los portales torii y los puentes se pintaron, se colocó cemento en los caminos, se rehabilitó el gran espejo de agua el cual ahora cuenta con peces dorados, se construyó una fuente y se sembraron árboles nativos de Japón como arces, peonias, wisterias, ciruelos y cerezos.
6. Fotogenia
El parque Masayoshi Ohira es un lugar ideal para practicar fotografía, pues cada rincón tiene un atractivo especial en cualquiera de las épocas del año. Además, los arcos, puentes y árboles, los cuales al florecer en primavera remiten de inmediato a los intrincados paisajes japoneses y crean todo un espectáculo capaz de transportar por unos momentos a tierras lejanas. No es de extrañar pues que muchos aficionados a la cultura japonesa acudan aquí ataviados con el estilo de su personaje favorito y para hacer videos. También es locación muy solicitada para quinceañeras y es común verlas en sesiones fotográficas.
7. Ambiente familiar
Debido a que se ubica en una zona predominantemente residencial, este parque es ideal para niños y mascotas. Además de las estructuras japonesas y poder admirar los peces del espejo de agua y la fuente, cuenta con una zona de juegos. Este rincón japonés en CDMX es una gran opción para darte un break si estás al sur de la ciudad.