Un hermoso rancho privado en el Ajusco para desconectar y disfrutar con quien tú quieras. ¡Aprovecha las vacaciones para lanzarte a Rancho el Juguete!
Entre arcos, fuentes, árboles frutales y pinos, conviven caballos, perros, gatos, cerdos, patos, miles de pájaros y mariposas. Aunque esta imagen parezca muy ajena al paisaje cotidiano de la ciudad, se trata de un rancho ubicado a las faldas del Ajusco, apenas a 40 minutos de la salida a Cuernavaca.
Rancho El Juguete es una propiedad privada que únicamente recibe a un cupo limitado de personas al día. A mediados del 2020, como respuesta ante la pandemia, decidieron abrir el espacio al público con la intención de ofrecer un lugar seguro para que las familias pudieran conectar con la naturaleza y disfrutar al aire libre, sin salir de la ciudad.
Jugar básquet, voley o futbol, ver animales, montar a caballo, hacer pasteles de lodo, brincar, escuchar el canto de los pájaros, o simplemente tirarse en una hamaca a tomar el sol y respirar el aire puro mientras te tomas un vino, son algunas de las opciones que encontrarás entre casi una hectárea de jardines.
Tienen además un lienzo charro, capilla, pista de cross para bicicletas, un campo de tiro con arco, tumbling a nivel de piso, área de juegos para niños, mesas de picnic, futbolito, curso de obstáculos y juegos de jardín como dominó y memoria gigantes, todo a tu entera disposición para que te diviertas como y con quien tú quieras.
Un lugar con historia familiar
La directora general y chef fundadora, Christiane de Anda, nos cuenta que el creador de este paraíso citadino fue su papá, Rodolfo de Anda, luminaria del cine mexicano, quien construyó este espacio y lo bautizó como Rancho el Juguete. Esto debido a que “Entre más grande el niño, mas grande el juguete”, y él nunca dejó de ser un niño.
Tras la muerte de su padre y con la llegada de su hija, Christiane decidió recuperar el sueño de que el rancho fuera un lugar lleno de vida que vibrara con música, arte y juegos. Así se dio también la oportunidad de cumplir otro sueño: ser chef de su propio restaurante, donde deleita con sus pizzas de masa madre, su plato insignia, aunque disfruta preparar lo que los clientes le pidan, desde paella hasta una tamaliza.
Para esta opción es necesario apartar tus alimentos el día anterior. Con la certeza de que todo lo que comerás será regional: sirven alimentos provenientes de agricultores y carniceros de la zona, respetando el concepto de zero waste.
Otro regalo de la casa para todo el que la visite es la Golden Milk Sanatesana, bebida de autor creada por la chef De Anda, y que combina a la perfección con la atmósfera del restaurante y el espacio.
¿Cómo planear tu visita a Rancho el Juguete?
A cada grupo que llega al rancho se le asigna un espacio de más tres metros. Este incluye una o dos mesas de picnic de hasta 10 personas, estacionamiento, baños y acceso libre a todas las instalaciones (estas sí son compartidas). Incluso puedes llevar a tu perro, siempre y cuando traiga correa en todo momento. Si se te antoja dar un paseo a caballo, puedes rentarlo durante media hora y serás asistido por un caballerango, con todas las medidas de salubridad.
En caso de lluvia, podrás tener libre acceso a la cabaña, una casa amueblada con chimenea, cocina equipada, baño, mesa de billar y sala de juntas para hasta 14 personas. Esta habitación también se renta por noche (vía Airbnb) o por día.
De martes a jueves puedes llevar tu picnic, hacer un asado, traer la comida que quieras o pedir algo de la lista de distribuidores de comida que llegan al rancho. De viernes a domingo, tienes el restaurante a tu entera disposición.
Si buscas un nuevo espacio para desconectarte del ajetreo citadino, este es el lugar perfecto.
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Pirámide 5, Santo Tomás Ajusco, Tlalpan.
Lunes a domingo, de 10:00 a 17:00 horas
Instagram @ranchoeljuguetemx